viernes, 4 de diciembre de 2015

Buscando lejos...

Hola amig@s ¿Qué tal estáis? 

Otra semana que ha pasado como un rayo, mi percepción del tiempo cada vez es más fugaz. Estas últimas semanas las he tenido a tope de actividades y formaciones,  he disfrutado mucho, quizá sea por eso por lo que se me han pasado volando.

Después de casi 40 días consecutivos de trabajo voy a descansar unos días, pero antes de irme quiero compartir una reflexión que puede resultarte interesante.

En las dos conferencias gratuitas de "Inteligencia Emocional" que he realizado durante el mes de noviembre, me han repetido  algunas preguntas en la misma línea. Todas relacionadas con la búsqueda de la felicidad. Queremos ser mejores personas y ser más felices.

La vida puede llegar a ser el mayor de los laberintos o el camino más fácil; Y en ocasiones, es más fácil de lo que creemos encontrar una solución o el camino correcto.

Dicen que una vez un besugo le pregunto a un bonito... "¡Oye Bonito!, tu debes ser mas viejo que yo y debes tener mayor experiencia, ¿Donde puedo encontrar eso que llaman océano? Lo he buscado por todas partes y no lo he encontrado.

¿El océano?. El océano es donde estás ahora mismo. Le dijo el bonito al besugo.
El besugo respondió enfadado. ¿Esto?  Pero si esto es sólo agua. Yo lo que busco es el océano.

El joven besugo se marchó enfadado a buscar el  océano en otro lugar.


Quizá en ocasiones tengamos comportamientos como el del besugo y que nadie se ofenda. Pero hay veces que los árboles no nos dejan ver el bosque.

Pregúntate si el océano que buscas no está más cerca de ti de lo que crees. Te invito a que tengas un diálogo contigo mismo/a, pero no un diálogo de besugos precisamente.

Quizá la felicidad que estás buscando fuera, tengas que empezar a buscarla dentro ti.

Con esta reflexión me despido,  hoy un post muy cortito pero con una profunda tarea,espero que la disfrutes.

Feliz fin de semana, salud y éxitos.